Basureo

La técnica del basureo (en inglés, scavenging) está relacionada tanto con los usuarios como con la seguridad física de los sistemas, de la que hemos hablado en el anterior capítulo; consiste en obtener información dejada en o alrededor de un sistema informático tras la ejecución de un trabajo ([Par81]). El basureo puede ser físico, como buscar en cubos de basura (trashing, traducido también por basureo) listados de impresión o copias de documentos, o lógico, como analizar buffers de impresoras, memoria liberada por procesos, o bloques de un disco que el sistema acaba de marcar como libres, en busca de información.

Aunque esta técnica no es muy utilizada en la mayoría de entornos, hemos de pensar que si un usuario tira a la basura documentos que proporcionen información sobre nuestro sistema, cualquier potencial atacante puede aprovechar esa información para conseguir acceder al equipo; algo tan simple como una factura en la que se especifiquen números de teléfono o nombres (reales o de entrada al sistema) de usuarios puede convertirse en una valiosa información para un atacante. Además, en ocasiones ni siquiera es necesario andar revolviendo por los cubos de basura en busca de información comprometedora: la carencia de nociones básicas sobre seguridad informática hace posible que los usuarios dejen al alcance de cualquiera información vital de cara a mantener un sistema seguro. Personalmente, en un aula de informática de la Universidad Politécnica de Valencia encontré por casualidad una hoja de papel que estaba siendo utilizada a modo de alfombrilla para el ratón; esta hoja era una carta personalizada que el director de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales había enviado a cada alumno de esa escuela para informarles de sus nuevas claves de acceso a ciertos recursos de la universidad, ya que las anteriores habían tenido que ser cambiadas porque un pirata las capturó. Con esa sencilla hoja de papel (en la figura 3.1 se muestra una copia - con los datos importantes ocultos, en el original no hay nada `censurado' -) cualquiera podría haber leído el correo de ese usuario, utilizar su acceso remoto de la universidad, curiosear en su expediente o participar en foros de asignaturas bajo la identidad del usuario atacado.

Figura 3.1: El resultado de un basureo involuntario.
Image scav.png


Como hemos dicho el basureo no es un ataque habitual en organizaciones `normales', simplemente porque los datos con los que estan trabajan no suelen ser de alta confidencialidad. De cualquier forma, si deseamos evitar problemas lo más inmediato es utilizar una máquina trituradora de papel (su precio no suele ser prohibitivo, y la inversión quizás valga la pena) para destruir toda la documentación antes de arrojarla a la basura; incluso nos puede interesar contratar los servicios de compañías dedicadas exclusivamente a la destrucción de estos soportes. En el caso de sistemas de almacenamiento lógico (discos, CD-ROMs, cintas...) también es importante una correcta inutilización de los mismos para que un potencial atacante no pueda extraer información comprometedora; no suele ser suficiente el simple borrado del medio o un leve daño físico (por ejemplo, partir un CD-ROM), ya que como comentaremos al hablar de recuperación de datos existen empresas capaces de extraer hasta el último bit de un medio borrado o dañado. Lo más efectivo sería un borrado seguro, seguido de una destrucción física importante que haga imposible la reconstrucción del medio.
© 2002 Antonio Villalón Huerta